El Grupo Municipal Popular ha denunciado públicamente la "purga" de personal que está llevando a cabo el Equipo de Gobierno local en el Ayuntamiento de Cuenca mientras el alcalde, Juan Ávila, está de vacaciones, "echando a gente a la calle para hacer un hueco a los suyos y seguir con el reparto de botín".
Según ha manifestado en rueda de prensa el portavoz de los populares, Pedro J. García Hidalgo, acompañado de la edil popular, Alejandra Barambio, hasta la fecha tienen conocimiento de cinco casos de trabajadores municipales a los que se les ha comunicado su despido inmediato, "siendo un caso especialmente sangrante, que se convierte en una verdadera persecución política, el caso de un trabajador que desde el año 2005 lleva prestando servicios jurídicos en el Ayuntamiento conquense, casualmente afiliado al Partido Popular, y que ahora el Gobierno local ha decidido que no es funcionario".
De esta forma, García Hidalgo ha asemejado la actitud de los dirigentes socialistas en el Ayuntamiento de Cuenca con "los de ciertos países en los que no hay gran aprecio y respeto con la democracia, ya que el Equipo de Gobierno se ha convertido en poder ejecutivo y judicial y ha puesto a este trabajador de patitas en la calle alegando que la toma de posesión de su cargo se realizó de forma unilateral".
Para los populares, esta nueva chapuza del Equipo de Ávila no hace más que dejar en evidencia "las ganas de seguir con el reparto del botín y mientras desatender sus obligaciones con la ciudad y con los conquenses".
Por su parte, la concejal popular y anterior responsable del Área de Personal en el Ayuntamiento de Cuenca, Alejandra Barambio, ha calificado de "caótica" la política en materia de personal que está llevando a cabo el Equipo de Gobierno encabezado por Ávila, asegurando que "tampoco es mucho de extrañar ya que es la continuidad de las políticas socialistas de irregularidades y chapuzas llevadas a cabo en anteriores legislaturas, como bien dice el Tribunal de Cuentas".
Barambio ha indicado que lo que está sucediendo ahora en el Ayuntamiento "clama al cielo ya que hay un absoluto desgobierno, un replay de las políticas del PSOE, que parece que han entrado como elefante por cacharrería pero con el objetivo firme de asaltar el Ayuntamiento mediante cauces no muy legales y no trabajar por la ciudad que es lo que deben hacer".
Para concluir, la concejal popular ha recordado algunas de las acciones del Gobierno de Ávila, "a cual más escandalosa", como los "decretazos" mediante los que se paralizaron procesos selectivos "aunque ahora unos siguen y otros no, sin saber aún con qué criterio"; la liberación de nueve concejales socialistas frente a los seis que había con el Gobierno del PP; la creación de una Dirección General encubierta con un salario anual de 72.000 euros y un complemento especifico de 3.000 al mes "que casi vale por dos liberaciones"; la contratación como personal eventual al marido de una concejal del PSOE cuando Ávila prometió no contar con familiares; y la persecución contra trabajadores municipales.