El Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Cuenca se ha felicitado por el anuncio efectuado por el presidente de la Diputación provincial, Benjamín Prieto, respecto a la rebaja de los costes del tratamiento de los residuos sólidos urbanos para los ayuntamientos que ya cuentan con Puntos Limpios. Una rebaja que permitirá reducir la deuda en este capítulo en 120.000 euros y que garantiza, además, que en el futuro los ciudadanos de Cuenca pagarán menos por este servicio sin perder ni un ápice su calidad.
El portavoz del Grupo Municipal, Pedro J. García Hidalgo, ha recordado que esta era "una de las batallas" que el anterior Equipo de Gobierno liderado por Francisco Javier Pulido, libró con Juan Ávila al frente de la Diputación, "que incluso se llevó a los Tribunales y que ahora, gracias a la gestión de Ángel Mariscal, se ha conseguido".
En este punto, García Hidalgo ha destacado el "ejemplo de coherencia y de lealtad institucional" que ha brindado la Diputación al hacer "lo que consideran justo y bueno para los ciudadanos sin tener en cuenta el color del que Gobierna en la institución beneficiada". En este punto, Hidalgo ha lamentado "que Juan Ávila no obrara igual en la Diputación y no obre ahora, como alcalde, con la misma lealtad".
De hecho, García Hidalgo ha destacado como ejemplo de estas prácticas desleales la decisión del hoy teniente de alcalde, Darío Dolz, al frente entonces de la política medioambiental de la Junta Socialista, de sellar la escombrera municipal. Eso supuso "que el Ayuntamiento tuviera que buscar un tratamiento alternativo a los residuos voluminosos, para los residuos municipales pero, fundamentalmente, supuso que las empresas, transportistas y particulares, ante la falta de soluciones, optaran por abandonar en la vía pública, descampados y polígonos industriales sus desechos".
Finalmente, Hidalgo ha pedido al concejal de Hacienda que haga un esfuerzo, recoja la invitación que ha cursado el presidente de la Diputación provincial y afronte la deuda que el Ayuntamiento mantiene con el Consorcio.
"La Diputación ya ha dado muestras de su buena voluntad y es hora de que el Ayuntamiento haga lo propio, y si ahora no hay dinero para pagar este servicio esencial y lo prefieren destinar a pagar sueldos de concejales, o del flamante Director general encubierto, por lo menos que pida una reunión con el responsable del Consorma y trate de pactar un calendario de pagos razonable", concluía Hidalgo.