El Grupo Popular ha pedido al alcalde Juan Ávila que se siente a negociar con la policía local y los bomberos para que no sean los más perjudicados por el plan de ajuste aprobado por el alcalde. Los populares han solicitado este encuentro tras mantener una reunión con ambos servicios en la que les han mostrado su indignación por los recortes que aparecen en el presupuesto municipal y que les afectan directamente. Ambos colectivos consideran que son los más perjudicados de la plantilla del ayuntamiento.
Según explica el Grupo Popular en el plan de ajuste y en el presupuesto se contempla una reducción muy importante de los ingresos de ambos cuerpos de seguridad en concepto de productividad, algo que a juicio de los populares, podría afectar directamente a la seguridad ciudadana, por tratarse en los dos casos de servicios que velan por el bienestar de los conquenses.
En este sentido, piden que Ávila se siente a negociar con la policía local y los bomberos y replantee por ejemplo los 200.000 euros de reducción de la policía local en concepto de productividad. Según dicen esta cantidad podría obtenerse perfectamente eliminando 4 liberados socialistas, tal y como ya han solicitado en numerosas ocasiones.
Los populares no entienden que tengan que ser los trabajadores los que sufran el reajuste económico del ayuntamiento, mientras que los políticos siguen cobrando y disfrutando de privilegios. Critican que Ávila no aceptara reducir su legión de liberados y sin embargo no le tiemble el pulso para reducir la productividad de los servicios de emergencia. Para el PP no es comprensible que se recorte en seguridad mientras se mantienen esta estructura ingente de liberados y se mantienen sueldos en el consistorio que superan los 70.000 y 90.000 euros, y complementos específicos de más de 4.000 euros.
En cuanto al trabajo de policía y bomberos, la estructura salarial actual de ambos garantizaba su presencia 24 horas al día los 365 días al año. Además los bomberos disponían de retenes para garantizar el servicio. Según el PP los ajustes actuales podrían suponer la inexistencia de retenes y la imposibilidad de garantizar un mínimo de plantilla tanto en noches como en lo eventos especiales que tengan lugar en la ciudad.
Por todo ello, el Grupo Popular solicita al primer edil que solucione cuanto antes este conflicto y se siente a dialogar con los funcionarios.