La concejal del Grupo Municipal Popular Alejandra Barambio ha pedido hoy al concejal responsable de aguas, Enrique Hernández Valero que se disculpe con los trabajadores del servicio, el sindicato CSIF y el Grupo Popular, por unas declaraciones en las que atribuye la disconformidad de estos trabajadores con el cambio a la empresa del agua, a una manipulación del PP. Barambio ha indicado que es lamentable que Hernández Valero haga estas declaraciones y le ha pedido que presente una disculpa formal a todos los afectados.
La edil del PP ha indicado que tal vez el señor Hernández Valero haya hecho estas declaraciones porque está acostumbrado a utilizar la “presión” como rutina de trabajo, olvidándose de que los trabajadores tienen derechos que no pueden despreciarse, y que los sindicatos elegidos democráticamente deben velar por el cumplimiento de las mejores condiciones de los trabajadores.
El Grupo Popular ha solicitado a los socialistas que respeten la voluntad y las opiniones de los trabajadores del servicio del agua, quienes han manifestado su disconformidad y desconfianza por el cambio que pretende hacer el equipo de Juan Ávila, trasladándolos a la empresa del agua sin asegurarles la vuelta al ayuntamiento. Barambio ha pedido a Ávila que deje a los trabajadores se expresarse en libertad y abandone esta actitud de hablar en nombre de ellos sin ceñirse a la verdad.
Los populares han criticado esta forma de actuar del equipo de gobierno y del alcalde, “disparando” contra todos aquellos que no están de acuerdo con la forma oscurantista en la que se están haciendo las cosas en el cambio de gestión del agua. De nuevo han exigido claridad y transparencia en este proceso, ya que por el momento el equipo de Ávila no les ha entregado la documentación oportuna, ni tampoco ha convocado la Junta General de la empresa del agua ni la Comisión Informativa de Personal, para informarles de las condiciones del traspaso de funcionarios y laborales del servicio de aguas a la empresa.
El Grupo Popular ha insistido en que tanto Ávila como Hernández Valero no han dicho la verdad a los trabajadores y han intentando manipularles, dando por sentado que estaban de acuerdo con el cambio a la empresa. Consideran que ambos han actuado de forma mezquina acusando a trabajadores y sindicatos de estar dirigidos. Según el PP, la realidad es que son ellos quienes no han querido que los trabajadores puedan expresarse con libertad, acerca de un tema muy importante que puede transformar sus condiciones laborales de forma irreversible. Insisten en que en temas como este de personal deberían ser mucho más escrupulosos y transparentes.