El Grupo Popular del Ayuntamiento de Cuenca ha anunciado hoy que presentará una moción en el próximo pleno ordinario en la que pedirán el cese de los dos funcionarios condenados por un juez por faltas de desconsideración hacia dos policías municipales, por referirse a ellos en términos como “no me sale de los cojones darte la documentación” o “usted no sabe quién soy yo”.
Los populares consideran muy grave que el alcalde Juan Ávila aún no haya tomado cartas en el asunto, y por eso pedirán que el Pleno condene estos hechos y que Ávila inicie un expediente disciplinario a estos dos responsables de Recursos Humanos del consistorio.
La moción, que no será presentada en el pleno del viernes 16 por tratarse ésta de una sesión extraordinaria que no admite iniciativas, será debatida en el pleno ordinario del mes de mayo, que está previsto que se celebre el próximo día 24. En el texto los populares pedirán que el pleno apoye la actuación de los dos policías municipales implicados, y que rechace la actitud de estos dos funcionarios que intentaron imponer su criterio ante los agentes de la autoridad, valiéndose de sus cargos en el consistorio.
El Grupo Popular considera muy grave que el alcalde no haya censurado la actitud de estas dos personas que se dirigieron a los policías en términos como: “son unos chulos y no saben quién soy…Estos se van a enterar. Llama a su jefe” y “No sé qué se han creído éstos”, tal y como se ha probado durante el juicio y recoge la sentencia.
Los hechos juzgados se produjeron en junio de 2011, cuando el Jefe del Área de Recursos Humanos, Vicente Fernández Campillo y el Jefe de Servicio de Gestión de Personal, José Ignacio Álvaro Chirveches fueron requeridos por agentes de la policía municipal por estacionar sus vehículos en doble fila. Ellos se negaron a mostrar su documentación y esgrimieron sus cargos en el ayuntamiento, diciéndole a uno de los policías que “le iban a abrir un expediente disciplinario por chulo y mal educado”.
En estos días se ha conocido la sentencia del Juzgado de Primera Instancia número 2 en la que se condena a ambos funcionarios por faltas de desconsideración a agentes de la autoridad y se les impone una multa y el abono de las costas del juicio.
Los populares consideran inaudito que el alcalde no se haya pronunciado en este asunto apoyando la actitud de los agentes. Opinan que si el primer edil no da ejemplo y censura este tipo de actitudes en el Ayuntamiento, esto podría incitar al resto de ciudadanos a comportarse con desobediencia hacia la policía municipal.
El PP recuerda que es un caso muy grave, porque se trata de dos altos cargos nombrados por Juan Ávila. Además uno de estos nombramientos fue declarado ilegal por un juez a raíz de una denuncia del Grupo Popular, en concreto el denominado “director general encubierto” cuyo sueldo asciende a 75.000 euros. El PP manifiesta que si el alcalde no cesa inmediatamente a ambos en sus responsabilidades, volverían a aparecer las sospechas de que Ávila le debe algo a estos señores, tal y como ya se dedujo cuando el juez declaró nulo el nombramiento de uno de ellos, y el alcalde volvió a nombrarlo.
Los populares reiteran que “Ávila no puede mantener ni un minuto más en sus puestos de responsabilidad a dos personas que han sido acusadas de un delito de desobediencia a la autoridad, y que muestran una y otra vez una actitud prepotente que daña la imagen de nuestro ayuntamiento” sentencian. Finalmente, vuelven a mostrar su confianza en que no se produzcan represalias hacia los agentes por parte del alcalde y su Equipo de Gobierno.