El Grupo Municipal Popular ha denunciado hoy que el equipo de gobierno de Juan Ávila les está ocultando el plan de ajuste que deberá ser aprobado en el pleno del próximo viernes, ya que a sólo tres días de su celebración aún no disponen del documento en cuestión. “Se trata de una nueva burla de Ávila”, afirman.
Tal y como ha explicado el PP municipal, el Ayuntamiento de Cuenca se ha acogido a la tercera fase del Plan de Pago a Proveedores que ha puesto en marcha el Gobierno de España, y debido a ello tiene que aprobar en pleno una reformulación del plan de ajuste en el que está inmerso el consistorio. De esta forma se podrá asimilar los 12 millones más de deuda que supondrá este plan para las arcas municipales. La reformulación del plan debe enviarse al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas como muy tarde el próximo viernes y previamente ha de ser aprobada por el pleno.
El Grupo Popular ha dado a conocer que les han convocado de manera irregular a una comisión de Hacienda que se celebrará mañana a las 10.30, ya que su convocatoria ha sido enviada a las 15.47 a través de correo electrónico y con asuntos de trámite, que el equipo de gobierno debería tener preparados desde hace tiempo. Sin embargo, el plan de ajuste ha sido retirado de esta comisión por Ávila en lo que valoran como “una maniobra que persigue evitar que la oposición pueda analizar con detalle el plan en cuestión”. Los populares consideran que este documento puede contener nuevas subidas de impuestos, tasas y precios públicos, además de recortes en los servicios públicos, que el alcalde querría ocultar.
El Grupo Popular espera conocer antes del próximo pleno cómo piensa reducir Ávila el 5% de los gastos de personal y gasto corriente al que se ha visto abocado de manera voluntaria por acogerse a las medidas extraordinarias que contiene el Real Decreto ley 8/2003 para aquellas entidades que tengan problemas financieros.
El PP califica además de “inadmisible” que la portavoz socialista diga que se va a reducir el 5% en gastos de personal y se va a aprobar en el pleno pero que no se va a decir cómo. Se trata, a juicio de la oposición de un talante “absolutamente antidemocrático”.
Por último, y ante esa “burla”, los populares han anunciado que van a estudiar las acciones oportunas para evitar otro atropello más de un alcalde que, “después de haber hecho el mayor de los ridículos convocando un referéndum absurdo, no debería hacer otra cosa que dimitir”, añaden.