La diputada nacional del Partido Popular por la provincia de Cuenca, María Jesús Bonilla, ha reiterado hoy que los objetivos del Gobierno de Mariano Rajoy y de María Dolores Cospedal son el empleo, el crecimiento de nuestra economía y la salvaguarda del Estado del Bienestar”.
Según ha afirmado la parlamentaria nacional, que durante el pasado fin de semana participó en la XXII Intermunicipal del PP, “salta a la vista que tanto el presidente Rajoy como la presidenta Cospedal, con el apoyo y el esfuerzo de todos los ciudadanos, han conseguido alcanzar estos objetivos por los que siempre ha trabajado el Partido Popular, tras los años de crisis y deudas que nos avocaron las políticas socialistas”.
Por ello, Bonilla ha indicado que las claves para lograr la creación de empleo, el crecimiento de nuestra economía y la garantía de los servicios sanitarios, sociales y educativos han sido no gastar más de lo que se ingresa, mediante la Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera; pagar lo que se debe a tiempo con la Ley de Control de la Deuda Comercial en el sector público; y con la premisa de ‘una administración, una competencia’, a través de la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local.
Sobre este último aspecto, la popular ha enfatizado la necesidad que existía desde hace años de llevar a cabo una Reforma de este calado para evitar duplicidades entre las administraciones y para conseguir una racionalización real del gasto, transparencia y buen uso de los fondos públicos, y todo ello garantizando la sostenibilidad de los servicios públicos que prestan los ayuntamientos.
Y es que como ha explicado María Jesús Bonilla, alcaldesa de Tarancón, el trabajo realizado por los ayuntamientos en los últimos años ha sido clave y fundamental para ayudar a sacar a España de la crisis y encaminarnos en la senda de la recuperación.
“Los ayuntamientos están siendo los protagonistas del cambio económico hacia el crecimiento, se han convertido en motor de este giro tan necesario y, gracias a su esfuerzo y al apoyo del Gobierno, están dando una lección de rigor presupuestario ya que 9 de cada 10 ayuntamientos, la mayoría del PP, están ya en superávit”, explicaba Bonilla.
El PP está indignado y rechaza cualquier tipo de corrupción
María Jesús Bonilla ha aprovechado también para mostrar la repulsa y el rechazo del Partido Popular de Cuenca contra cualquier tipo de corrupción, remarcando la indignación absoluta con estos casos, “nosotros en la doble condición de ciudadanos y militantes”.
Asimismo, ha incidido en que el PP está trabajando sin descanso para que estas malas prácticas no se vuelvan a producir jamás y ha ensalzado como el Gobierno de Rajoy ha aprobado la primera Ley de Transparencia, que somete al control público a partidos, sindicatos e incluso a la Casa Real; ha llevado a cabo medidas inéditas como la publicación de sueldos, subvenciones y contratos de la administración; y ha regulado las cuentas de los partidos, prohibiendo las donaciones de empresas y las condonaciones de deuda.
Además, ha fortalecido las penas por evasión fiscal, ha incluido el delito por financiación ilegal de partidos y ha recuperado la responsabilidad penal de los partidos, que el PSOE eliminó en 2010. Mientras que próximamente el Gobierno aprobará el Estatuto del Alto Cargo y la Ley del Control de la actividad económica y financiera de los partidos.
Por último, Bonilla ha manifestado que la corrupción “no es un problema de ideologías, puesto que hay casos en todos los partidos, sino de las ambiciones y urdas personales, por lo que sería conveniente que todos los políticos actuáramos con responsabilidad, dejáramos de lado nuestros intereses partidistas y nos encamináramos unidos hacia el mismo destino, que es acabar definitivamente con una lacra que nos afecta a todos, pero lamentablemente el PSOE ha dado la espalada al pacto anticorrupción que ha propuestos el Partido Popular”.
“La corrupción nos roba el dinero a todos, y no permitiremos que nos robe también la confianza; es injusto que se extienda la sospecha a todos los políticos, cuando la mayoría intentamos trabajar honestamente y por vocación de servicio público”, concluía.