Tras la denuncia formulada por la Comisión de Sanidad del Partido Popular de Cuenca el pasado 13 de noviembre, los responsables sanitarios socialistas han intentado sin éxito justificar la cruda realidad de su nefasta gestión al frente de la sanidad pública conquense y que en tan solo en cuatro meses ya nos han llevado a un aumento considerable de las listas de espera y a un verdadero caos sanitario.
Por ello, desde el PP de Cuenca han vuelto a denunciar públicamente que el Gobierno de García-Page está ocultando “sinuosamente” las listas de espera del Hospital Virgen de la Luz de Cuenca y le ha acusado al bipartido PSOE-Podemos de llevar a nuestro Hospital desde el puesto 41 en el ranquin nacional de hospitales al último lugar por su incontrolada lista de espera.
Según han manifestado desde la Comisión de Sanidad del PP, en la actualidad el Hospital Virgen de la Luz soporta más de 2.000 pacientes en demanda quirúrgica, listas de espera de un año para determinadas pruebas radiológicas, agendas cerradas que impiden ofrecer citas en determinadas especialidades, una alta dosis de populismo sanitario y pacientes programados en traumatología para dentro de 630 días.
“Algunos pacientes con este panorama resolverán su demanda de asistencia sanitaria dentro de 1.000 días, algo solo explicable por el sinsorgo de gerencia sanitaria que sufrimos en nuestro Hospital y que sigue obcecadamente las instrucciones de los dirigente del PSOE, aunque con ello vayan en contra de los intereses de los propios pacientes”, aseveraban desde la Comisión.
Asimismo, el PP ha sacado a la luz pública como el gerente Pérez Sola “sigue evitando explicar por qué durante el mes de noviembre se han dejado de realizar endoscopias en el CEDT de Tarancón y se han ‘descitado’ a los pacientes a los que ya se les había asignado día y hora para la exploración; y por qué son incapaces de optimizar el nuevo quirófano con el que se dotó al Hospital en la anterior legislatura”.
“De vuelta a las derivaciones a la sanidad privada y a las peonadas”
La Comisión de Sanidad también se ha referido a otros de los asuntos de máxima gravedad que es la vuelta, por parte del PSOE, a echar mano deliberadamente de la sanidad privada y a volver a abusar de las peonadas.
Según han subrayado desde el PP, una vez demostrada “la incompetencia” de los responsables socialistas para optimizar los recursos públicos, se anuncian derivaciones veladamente masivas a la sanidad privada, que sin duda se producirán tras las elecciones del 20 de diciembre. Además, han acusado a Page de tener una hoja de ruta en relación con las derivaciones a la sanidad privada, como ya sucedió con el anterior gobierno del PSOE, cuando en el año 2011 dejaron sin pagar 200 millones de euros en Castilla-La Mancha a la sanidad privada.
Por último, la Comisión de Sanidad ha dado a conocer la intención de la gerencia del SESCAM de retornar a “la perversa” estrategia de peonadas, que –como han recordado- ya provocó la quiebra sanitaria con el Gobierno de Barreda, y que ahora llaman los socialistas, en unas recientes declaraciones, ‘salarios emocionales’, “algo que en cualquier sistema sanitario europeo hubieran provocado el cese inmediato del gerente responsable”.