Un Gobierno carente de ideas originales y propias. Así resume el diputado regional del Partido Popular por la provincia de Cuenca, José Manuel Tortosa, las políticas de la Junta de Comunidades gobernada por Page en lo concerniente a Turismo, un sector de gran importancia para la economía en la provincia de Cuenca y en Castilla-La Mancha.
“Page promete empleos, pero, como nos tiene acostumbrados, no dice cómo ni cuándo van a poder los castellano manchegos trabajar. Eso sí, no tiene ningún pudor en ‘revendernos’ viejos proyectos ya anunciados por el ex presidente socialista Barreda en 2006, o apropiarse de iniciativas ya puestas en marcha por instituciones como la Diputación provincial de Cuenca en lo que se refiere a la Ruta de los Dinosaurios o las Minas de Lapis Specularis”, afirmaba el popular.
Para Tortosa, “los ciudadanos y las empresas no necesitan que se les presente y se les hable varias veces de los Planes Estratégicos, en este caso el de Turismo, quieren realidades y que el ejecutivo socialista que gobierna la Junta se ponga a trabajar en ello”. “Eso sí, con las cuentas claras”, añadía.
“Aunque mal camino lleva Page y su Gobierno –manifestaba José Manuel Tortosa- si en una de las primeras oportunidades que tiene de promocionar nuestra región ante el mundo, se lo toma con la desgana y la falta de creatividad e iniciativa que el stand de Castilla-La Mancha demostró en la Feria Internacional de Turismo, Fitur”.
Y es que como ha relatado el diputado del PP, “las actividades programadas sufrían constantes retrasos y se cambiaban sin informar a sus responsables. Además a quienes hablaban desde el escenario no se les escuchaba y gran culpa de ello la tenía la atracción hinchable que se encontraba en el stand que se acompañaba de una música excesivamente alta e inoportuna”.
Otro inconveniente con el que se encontraron alcaldes, empresarios y artistas que quisieron explicar sus proyectos en Fitur fue también el excesivo ruido que provenía de otros stands cercanos, “ante lo que los responsables de la Junta no movieron un dedo”.
En cuanto a la estructura del stand castellano manchego en la feria madrileña, Tortosa lo ha calificado como “poco atractivo y muy frío”. Según el popular, “no estaba clara la separación de las provincias y los folletos informativos se encontraban apilados en los mostradores, dando una gran sensación de desorden”.
Parece mentira, añadía el diputado regional, que el espacio dedicado a las degustaciones gastronómicas “fuera tan sumamente pequeño que no pudieron pasar todas las personas que estaban allí y que las que lo hicieron estaban hacinadas”.