El Partido Popular de Cuenca ha pedido el apoyo y la confianza de los conquenses en las urnas el próximo 26 de junio para evitar posibles pactos que, como está sucediendo en Castilla-La Mancha con el Gobierno del PSOE y Podemos, acabarían con el Estado del Bienestar a no ser de la excelente labor de los ayuntamientos y entidades sociales.
Desde el PP han asegurado que mientras que hay partidos de izquierdas que cuando están en la oposición enarbolan los servicios sociales pero que cuando son gobierno los dejan totalmente desatendidos, “el Partido Popular siempre mantiene la misma postura de defensa a ultranza de los servicios sociales, como desmostó el propio Gobierno de Cospedal garantizándolos por Ley tras la quiebra en la que los dejó el PSOE en 2011”.
Es por ello, que desde las filas populares han calificado de “cinismo que no tiene comparación en la historia de los Servicios Sociales de Castilla-La Mancha” las recientes declaraciones tanto de la Consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, como de los candidatos del PSOE al Congreso y al Senado por Cuenca. En ellas, básicamente, presumen de la creación de un nuevo de modelo de Servicios Sociales en Castilla-La Mancha, cuando en la actualidad, fruto de sus nefastas políticas, son los ayuntamientos los únicos que mantienen en exclusiva la estructura de los Servicios Sociales, a pesar de ser una competencia única del Gobierno de Page y Podemos.
Y es que la sorpresa es mayúscula ante la completa distorsión de la realidad que vende el Gobierno de Page-Podemos que, entre otras cuestiones, tiene la poca vergüenza de decir que apuesta por las políticas sociales cuando los Servicios Sociales Básicos de los ciudadanos son, precisamente, los más perjudicados por su gestión socialista, provocando a su paso un escenario totalmente dantesco con serio peligro de suponer su destrucción sistemática.
Y es que si nos referimos a las personas mayores y las que puedan tener alguna discapacidad, a día de hoy, al Gobierno de Page se ha olvidado, o peor aún, los está ninguneando, eliminando de su agenda la Convocatoria de Ayudas Económicas de la que dependen muchas personas para su recuperación o la mejora de su calidad de vida.
A su vez, en materia de mayores, las Viviendas de Mayores siguen siendo únicamente financiadas por los ayuntamientos, únicos garantes para el mantenimiento de un recurso de alojamiento alternativo que presta servicio, sobre todo, en las zonas rurales, con una población muy envejecida y con muy escasas alternativas de acceso a los mismos.
En referencia a la Dependencia, resulta muy interesante la estrategia del PSOE de “repetir una mentira muchas veces dándola como cierta para intentar convencer a los demás”. Pero la verdad es que según datos de la Plataforma en Defensa de la Ley de Dependencia de Castilla-La Mancha, en solo un mes, 189 dependientes, mucho de ellos niños, han perdido la prestación económica de la que disfrutaban con todo el derecho.
Mencionar las Ayudas de Pobreza Energética en las que se tuvieron que ampliar plazos y requisitos para no hacer más el ridículo, el cada vez más importante retraso en las tramitaciones de las Ayudas de Emergencia Social y del Ingreso Mínimo de Solidaridad anunciándolas falsamente como si existiera una Renta Mínima, así como una Convocatoria PRIS que va menguando económicamente según se va anunciando, son solamente unos ejemplos de “las grandes hazañas” de las que el Gobierno de Page se siente orgulloso presentar ante distintos colectivos.
La preocupación del Partido Popular por el gravísimo deterioro de los Servicios Sociales de nuestra región va aumentando en la medida que el Gobierno de Page va avanzando en un supuesto “modelo de Servicios Sociales” que puede suponer su destrucción si no fuera por el esfuerzo decidido de los Ayuntamientos y las Entidades Sociales, los únicos que apuestan de forma decidida por ellos. Es por ello, por lo que los populares han insistido en la necesidad de que los españoles, el 26 de junio, apuesten por la moderación y la responsabilidad, evitando así pactos de otros partidos que prefieren la autocomplacencia y su propio interés político al mantenimiento y mejora de los Servicios Sociales.