El diputado regional del Partido Popular por la provincia de Cuenca, José Manuel Tortosa ha criticado el cinismo y la insolencia de los dirigentes políticos del Gobierno de Page, “que aun no habiendo puesto ni una sola piedra del nuevo Hospital de Cuenca en dos años, siguen prometiendo y anunciado nuevos servicios para este centro sanitario que a este ritmo estará finalizado en 200 años”.
Según ha manifestado Tortosa, “el Gobierno de Page lleva dos años vendiendo planes sobre planes, anunciando obras sobre obras, prometiendo inversiones sobre inversiones; pero la realidad es que, a fecha de hoy, el nuevo Hospital de Cuenca está paralizado y que de los nueve millones de euros presupuestados para esta obra en 2016 no se ha ejecutado ni el cinco por ciento, sin olvidar que Page todavía tiene Presupuestos para 2017”.
El dirigente del PP ha recordado como Page prometió, en periodo electoral, que antes de finalizar el año 2015 se retomarán las obras del nuevo Hospital y como Guijarro se comprometió, en agosto de 2015, a que tendría “plena operatividad” entre cinco y seis años, incluida su construcción, equipamiento y traslado. Y hoy, continuaba, “19 meses después de la supuesta reanudación de las obras no han hecho absolutamente nada, más que poner tres grúas el día que los diputados del PP visitábamos los terrenos”.
Asimismo, Tortosa ha recordado a sus homólogos socialistas que el nuevo Hospital de Cuenca sí que podría ir hoy “a velocidad de crucero”, como auguro Martínez Guijarro, si el PSOE de Barreda y de Page no hubieran dejado en el año 2011 cerca de 9.500 millones de deuda en Castilla-La Mancha, un déficit del 7,5% y más de 600.000 facturas sin pagar. Entre ellos, el diputado ha hecho especial referencia a la deuda que el Gobierno socialista dejó en el área sanitaria: 5.000 millones de euros, lo que provocó que miles de proveedores se quedaran al borde de la ruina; y 158.795 facturas sin pagar en el SESCAM por valor de 1.092 millones de euros, de los que más de 9 millones son de factura de luz, 35 millones de prótesis e implantes y 12,2 millones de lavandería. A esto se suma los 200 millones de deuda socialista con hospitales privados, el agujero de 400 millones de euros de deuda con las farmacias y la deuda de 77 millones de euros en los centros de salud.
Por ello, el diputado regional ha asegurado que “el PP no va a recibir lecciones ni reproches de aquellos que arruinaron nuestra región, que precisamente son los mismos que ahora han roto con la inercia positiva que dejó Cospedal en nuestra tierra y comienzan a llevar a Castilla-La Mancha en retroceso”.