La localidad de Beamud lleva ya casi 20 días sin transporte público, en concreto de autobús. Este servicio, cuya competencia corresponde prestar a la Junta de Comunidades, se interrumpió el pasado 1 de julio, dejando incomunicado al pueblo, “es una situación muy grave”, denuncia su alcaldesa, Raquel Oliver, “y a la que el Gobierno Regional no está prestando ninguna atención, dándonos largas constantemente”, apunta.
Este problema se acrecienta en la medida en que el autobús es el único transporte público del que dispone Beamud por lo que es imprescindible para que sus habitantes puedan desplazarse, sobre todo a la capital, “este transporte es muy necesario para el pueblo porque, sobre todo, lo utiliza gente mayor que necesita ir al médico, hacer compras o visitar a familiares en Cuenca”, recalcaba la alcaldesa, “de ahí la necesidad imperiosa de que volvamos a tener autobús”, insistía Oliver.
La alcaldesa, y también responsable provincial del PP del Área de Despoblación y Desarrollo Rural, reclama al Gobierno que preside Page que se preocupe de todos los castellano manchegos por igual, independientemente de si viven en pueblos con más o menos habitantes, “es lamentable que la Junta de Comunidades discrimine de esta manera a los pueblos más pequeños, actúa como si no existiésemos, dando la espalda a nuestros problemas. Esta insensibilidad de la Junta con el mundo rural queda patente una vez más entre los gobernantes regionales y quienes los representan en esta provincia”, insistía Raquel Oliver, “pero claro, ¿que podemos esperar de García-Page si, primero, desconoce la realidad de nuestra provincia, de nuestros pueblos porque no los visita y, segundo, está más preocupado en cómo reparte ahora sus vicepresidencias?”, se preguntaba la alcaldesa.
Para Raquel Oliver “suprimir los autobuses en los pueblos más pequeños es una curiosa manera de luchar contra la despoblación en nuestra provincia”, ironizaba la responsable municipal, “aunque luego se le llene la boca a los representantes de la Junta de que están poniendo en marcha medidas para que los vecinos se queden en nuestros pueblos. ¿Dónde están esos recursos y esas soluciones si no son capaces de mantener un autobús, que es vital para un pueblo como Beamud?”.
La alcaldesa también hacía referencia a la situación paralela que están viviendo otros municipios de la provincia de Cuenca relacionada con el transporte de autobús y en la que la Junta de Comunidades no ha tenido el más mínimo escrúpulo en culpar a otras administraciones, en este caso al Ministerio de Fomento, de un conflicto generado, precisamente por la poca capacidad de gestión y negociadora del Gobierno de Page, además de no cumplir con el pago a la empresa en la subvención de los billetes que tenía comprometido, “en el caso de Beamud no tiene a quien culpar, pues la línea es exclusivamente competencia de la Junta, pero sí queda patente que no les importa la suerte que podamos correr los vecinos que vivimos en los pueblos de Cuenca”, concluía Raquel Oliver.