El alcalde de Cuenca, Ángel Mariscal ha pedido al presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, que ponga a disposición de la empresa que construye el nuevo Hospital de Cuenca, todos los recursos necesarios porque las obras no marchan a la velocidad deseada. "Es una obra interminable y a este ritmo van a tener que pasar varias generaciones de conquenses para poder ver el Hospital terminado", ha dicho.
Mariscal ha recordado que el presupuesto de construcción se ha cifrado en 102 millones de euros, más IVA, cifra similar a la que será necesaria para equiparlo; en este sentido ha lamentado que el Gobierno socialista de la Junta no invierta más dinero en este proyecto, lo que aceleraría su construcción y lo que es una prueba de que tiene abandonada a la provincia de Cuenca.
El alcalde de Cuenca ha venido criticando no sólo el abandono de las obras del nuevo Hospital, sino también las del centro dotacional del Terminillo, donde la Junta de Comunidades, sin contar entonces con el Ayuntamiento gobernado por el Partido Popular, hizo un Plan de Singular Interés (PSI) para la construcción del Hospital y que incluía una serie de infraestructuras que están abandonadas, en las que se han producido robos de tapas de alcantarilla, entre otros destrozos.
Asimismo, señalaba el alcalde de Cuenca, la Junta de Comunidades tendrá que costear todas las conexiones urbanísticas con la ciudad, (luz, agua, carreteras, etc.), y también el traslado de la depuradora de aguas residuales que quedaría en la acera de enfrente del centro sanitario.
Para Ángel Mariscal es “una tomadura de pelo a todos los ciudadanos de Cuenca que digan que las obras van bien”.