El Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Tarancón ha preguntado a Page y a Carrizo cuántas veces más tienen que anunciar la construcción del nuevo Instituto de Trancón para que éste sea una realidad y no se quede, como hasta ahora, en promesas incumplidas.
Según ha indicado la portavoz del PP taranconero, María Jesús Bonilla, el PSOE se ha comprometido con la construcción del Instituto nº 2 de Tarancón en numerosas ocasiones y, curiosamente, coincidiendo siempre con los finales de legislatura. “Empezamos en el año 2009, con Barreda de presidente; y seguimos en el año 2010 cuando, a escasos meses de unas elecciones, licitaron el proyecto por un importe de 340.073 euros; que, por cierto, nos preguntamos qué ha pasado con aquel proyecto teniendo en cuenta que el nuevo Instituto que ha prometido Page va a estar en la misma ubicación que decidieron en 2010; ¿utilizarán este proyecto o se volverán a gastar más de 50 millones de pesetas en hacer uno nuevo?”, se preguntaba Bonilla.
A ello, continuaba la portavoz del PP, se suman las promesas del actual Gobierno de Page durante estos tres años de legislatura. Como ejemplo, ha recordado como el 9 de enero de 2018 el Consejo de Gobierno autorizó la ejecución de este nuevo Instituto para el primer trimestre, “donde ya van tarde porque estamos a punto de entrar en el cuarto trimestre y no ha habido ningún movimiento, y eso que Felpeto dijo que convenía avanzar en estas obras por la necesidad de esta nueva infraestructura, por su viabilidad técnica y su supuesta prioridad presupuestaria; es aquí donde nos preguntamos cuáles eran estas necesidades para llegar al tercer trimestre sin hacer nada”, se cuestionaba al popular.
El siguiente anuncio, el 16 de febrero de 2018. “En este caso, Page vuelve a utilizar Tarancón como escenario propagandístico junto a Carrizo y anuncia por enésima vez que el Gobierno regional tiene la intención de comenzar las obras entre el verano y septiembre; pero estamos a mediados de septiembre, y todavía no han puesto ni la primera piedra”, denunciaba la portavoz del PP.
El 24 de abril 2018, el anuncio viene de la mano del delegado de la Junta en Cuenca, Ángel Tomás Godoy, quien asegura que ya se ha publicado la licitación del proyecto y de la obra para la construcción de la primera fase del IES nº 2 de Tarancón, por la que se establecían 25 días para la redacción del proyecto y ocho meses para la ejecución de la obra. “Y nuevamente, nos mienten”, denunciaba Bonilla.
Coincidiendo con las fiestas locales, el 7 de septiembre, Page vuelve a Tarancón a hacerse la foto con Carrizo y a anunciar a bombo y platillo que la construcción el IES nº 2 comenzará en breve y que las obras ya han sido adjudicadas. “¿Cuántos anuncios necesitamos para que comiencen las obras? ¿Cuántas veces tiene que venir Page a Tarancón para que sea una realidad? Porque nos dijeron que comenzarían las obras en el primer trimestre del año, después lo retrasan a verano, y ahora, nos preguntamos para cuándo”, manifestaba Bonilla al advertir que, como estamos a escasos meses de unas elecciones, “mucho nos tememos que todavía nos lo van a prometer unas cuantas veces más”.
Por todo ello, Bonilla ha pedido al Gobierno de Page que se deje de promesas, cumpla con su compromiso, cosa que fue incapaz el entonces presidente socialista Barreda, y “no ocurra como en 2011, cuando se dejaron sin pagar las obras del colegio Duque de Riansares y varios de los alumnos tuvieron que recibir clases en las estancias del Centro Parroquial”.
En este sentido, la entonces alcaldesa de Tarancón ha recordado como el Ejecutivo de Cospedal, en colaboración con el Equipo de Gobierno taranconero, consiguió reanudar las obras de ampliación del Duque de Riansares, que se paralizaron después de que el anterior Gobierno socialista dejase de pagar a la empresa responsable de los trabajos, e invertir 2,2 millones de euros en su finalización.
“Solo esperamos que el Gobierno de Page asuma su responsabilidad, empiece las obras como ha prometido tantas y tantas veces y, lo que es muy importante, que paguen en tiempo y forma, y no vuelvan a épocas pasadas en la que el Gobierno socialista de Barreda dejó una deuda en educación de 2.900 millones de euros, las nóminas de los docentes en peligro de cobro y a los centros educativos sin dinero para cubrir sus gastos de funcionamiento”, concluía Bonilla.