El diputado responsable del Servicio Provincial de Prevención y Extinción de Incendios de la Diputación de Cuenca, David Cuesta, acompañado del jefe del servicio, Francisco Soriano, se ha desplazado este martes hasta el punto limpio de Chillarón, donde ha podido comprobar la inexistencia de peligro para la población por el incendio declarado hace seis días en este emplazamiento, tal y como criticaron en nota de prensa el Comité de Empresa del Servicio de Bomberos y al que se sumó el portavoz del Grupo Socialista en la Diputación, Joaquín González Mena.
Y es que, según ha constatado in situ, este punto limpio no solo está ubicado a varios kilómetros del municipio de Chillarón, sino que, además, el lugar donde se originó el incendio —en el exterior de dicha infraestructura— está rodeado por un camino y tierras de labor, por lo que difícilmente se podía propagar y, mucho menos, poner en peligro a los vecinos de Chillarón; de hecho, se calcinaron 27 metros cuadrados. Es por ello que no ha dudado en resaltar la adecuada decisión adoptada en su momento por el jefe del Servicio de retrasar en torno a media hora la activación del dispositivo al tratarse de un “incendio delimitado y controlado”, además de por la circunstancia de que en el Parque de Motilla se iban a contar con los suficientes efectivos para atender este pequeño siniestro sin alterar el operativo del servicio y manteniendo cubierta esa zona de la provincia ante cualquier emergencia. De hecho, tal y como ha recordado, desde el parque motillano se pudo intervenir al poco tiempo en un accidente de tráfico en la CM-220, a la altura del cruce de Monteagudo de las Salinas.
No obstante, sí ha recriminado tanto al Comité de Empresa del Servicio de Bomberos como al portavoz socialista su actitud de intentar alarmar innecesariamente a la población “inventándose peligros y poniendo en entredicho la actuación del servicio”. Y es que, a juicio del diputado, no es de recibo que encima el Comité de Empresa del Servicio de Bomberos pretenda trasladar a la opinión pública que el motivo del retraso era evitar pagar horas extras cuando “esta administración no ha tenido problemas en este aspecto como se puede constatar”.
Posturas que no ha dudado en calificar de “irresponsables” por no temblarles el pulso a la hora de recurrir a la alarma social para intentar desacreditar la labor de este servicio ante la opinión pública y conseguir sus propios fines, que, según ha remarcado el diputado, en el caso de Mena no es otro que intentar enturbiar la gestión del Equipo de Gobierno liderado por Benjamín Prieto, tal y como viene intentando hacer desde el inicio de la legislatura, recurriendo para ello a la manipulación de la realidad o, incluso, a la mentira.
De hecho, ante las “invenciones del Comité de Empresa sobre la actuación en el incendio de Chillarón, ni siquiera se preocupó en comprobar si eran ciertas o no, simplemente se sumó a las críticas porque iban en la misma dirección que su objetivo”.