Si las Jornadas Romanas de Valeria quieren seguir siendo uno de los mejores reflejos y un referente nacional, el marco en el que se desarrollan ha de seguir rehabilitándose. Para el diputado regional, Benjamín Prieto, el contenido de las actividades de esta semana es de una calidad extraordinaria y su valor aumenta si los monumentos que alberga la ciudad romana continúan recibiendo inversiones. Prieto acudía en la tarde de ayer, junto al diputado provincial Daniel Pérez Osma, al ciclo de conferencias quetenía lugar en la Iglesia de La Sey, donde intervenían Andrés Moreno García y Eduardo Domínguez Suay, además de presentarse la novela Flor de Almendro Principium et Finis, de Carmen Dimas Benedicto.
Prieto agradecía poder disfrutar, un año más, de las Jornadas Romanas, “además de nuestro patrimonio y de seguir concienciándome de lo importante que es mantenerlo”. Recordaba el también responsable del Partido Popular conquense las inversiones que durante estas dos pasadas legislaturas se han venido realizando en el patrimonio provincial y, por supuesto, en Valeria, “aquí han superado los 800.000 euros. Estas inversiones hoy permiten que estas jornadas puedan ser más lucidas y que lleguen a más, que se pueda aprovechar mejor el patrimonio”, afirmaba.Hacía Prieto mención a la iglesia de Santa Catalina, “que era una ruina hasta hace prácticamente un año” y a la reproducción del Ninfeo, “que permite hacernos una idea de su espectacularidad, ya que era, después de la Fontana de Trevi, el mayor del Imperio”.
“Creo que todo el esfuerzo inversor ha merecido la pena, pero esto no se puede parar aquí, porque el patrimonio es una constante, algo vivo y por tanto los poderes públicos deben estar implicados en él”, continuaba Prieto, quien afirmaba que para las instituciones como la Junta de Comunidades o la Diputación de Cuenca, la inversión en patrimonio “no es una opción, es una obligación. Deben llevar y elaborar una hoja de ruta y trabajar para evitar su deterioro y ponerlo en valor”.
Benjamín Prieto insistía en que apostar por unos monumentos en buen estado “beneficia el desarrollo económico, que es una manera de evitar que quienes viven en nuestros pueblos se vayan” e insistía en que“no valen excusas ni tratar de buscar atajos, hay que ir a lo directo que es vincular nuestros presupuestos al patrimonio y a los numerosos lugares que tenemos el privilegio de que existan en la provincia de Cuenca”, finalizaba.