Las candidatas del Partido Popular de Cuenca al Congreso de los Diputados, Beatriz Jiménez y María Jesús Bonilla, han podido conocer de primera mano la iniciativa de FABLAB Cuenca, un proyecto en fase de desarrollo para la creación de un Laboratorio de Fabricación Digital, abierto a la todas las personas niños, jóvenes y mayores, y que está dedicado a la divulgación y enseñanza de la fabricación digital a través del software libre, la impresión 3D y las nuevas técnicas de creación digital.
Las candidatas del PP también han participado en uno de sus talleres innovadores donde se puede fabricar (casi) cualquier cosa a través de la educación STEAM, un nuevo modelo de aprendizaje basado en la enseñanza de ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas de una manera integrada con proyectos multidisciplinares y el desarrollo de actitudes como el trabajo en equipo.
Según ha relatado Bonilla, se trata de un innovador proyecto liderado por una mujer, Delia Millán, que queda al servicio de Cuenca y de Castilla-La Mancha y que tiene un aspecto social muy importante, “se trata de un espacio donde los ciudadanos estén conectados y donde puedan colaborar unos con otros; una apuesta fuerte para poner en valor asientos como la innovación y el diseño, el desarrollo de la curiosidad y la imaginación o la búsqueda de soluciones diversas a un único problema”.
En este sentido, Jiménez y Bonilla han coincidido en ensalzar el papel de la mujer emprendedora “y es aquí donde es clave un Gobierno de Partido Popular que apoye de forma clara a las mujeres que deciden dar un paso adelante en el mundo empresarial y arriesgarse a emprender un nuevo negocio”, con medidas fiscales, educativas, burocráticas, de seguridad jurídica, de la segunda oportunidad, de conciliación; y es aquí desde donde deben estar los gobiernos, de la mano de los emprendedores.
“Ha sido una tarde muy interesante, fascinante; estamos hablando de unos instrumentos esenciales para abrir fronteras y horizontes personales y sociales. Una puerta abierta a los nuevos recursos que nos ofrecen las tecnologías. Es apasionante el enorme contenido social y solidario de esta realidad, espacio y proyecto que tenemos en Cuenca”, concluía María Jesús Bonilla.