El Grupo Popular en la Diputación de Cuenca ha lamentado que Juan Ávila, presidente del Consorcio Provincial de Medio Ambiente para la gestión de los residuos, haya conseguido situar a la provincia de Cuenca a la cola en recogida selectiva de residuos sólidos urbanos y de la construcción, incumpliendo continuamente todos los compromisos adquiridos en esta materia.
Según ha explicado en rueda de prensa el viceportavoz del Grupo Popular, Ángel Mariscal, a pesar de haberlo solicitado en noviembre, el PP aún no ha recibido información de las cantidades recogidas ni del destino dado a los residuos especiales y peligrosos, muy contaminantes, depositados por los conquenses en los puntos limpios de la provincia, ni de las empresas responsables de su transporte y almacenamiento temporal (autorizaciones, seguros, documentos de control, etc.).
Del mismo modo, desde el Grupo Popular han asegurado que tampoco tienen conocimiento sobre el destino y uso dado a tres camiones especialmente acondicionados como “punto limpio móvil” y que fueron cofinanciados por la Unión Europea.
Respecto a PIEMSA, Mariscal ha vuelto a solicitar que se haga un estudio económico del coste del servicio de los puntos limpios y que se valoren las alternativas en los municipios de menos de 500 habitantes, e incluso de menos de 1000.
“Tras entrar en vigor el Decreto 170/2009 que obliga a que en los puntos limpios haya personal y que se atienda al público al menos 15 horas semanales se hace todavía más necesario el estudio. En la actualidad hay puntos limpios que están cerrados durante meses, completamente saturados de residuos, sin ningún tipo de separación selectiva, y alguno que sólo abre los sábados por la mañana. Los alcaldes tienen que saber cuales van a ser sus obligaciones y que gastos tienen que asumir”, indicaba el viceportavoz del PP.
Asimismo, Mariscal ha lamentado que a pesar de destinar más de 7,1 millones de euros a la construcción de puntos limpios, estos serán de tercera categoría, ya que ninguno cumplirá las tipologías del Decreto y se tendrán que acoger a la excepcionalidad.
CONSORMA
En lo relativo al CONSORMA, el diputado del PP ha asegurado que es lamentable el desprecio de Juan Ávila por los estatutos del Consorcio y por el cumplimiento de los acuerdos de su Junta General, ya que a día de hoy sigue sin constituirse el Consejo de Administración, algo que si se hizo en anteriores legislaturas; se toman acuerdos sin convocar a los órganos colegiados; se sube a mitad de 2009 la tasa de la basura; no se ejecutan los acuerdos de la Junta General; no se firman los convenios con los sistemas integrados de gestión (pilas, aparatos eléctricos, vehículos fuera de uso, etc); y no se elaboran proyectos ni programas de trabajo, ni se hacen memorias ni se traslada a los entes consorciados ninguna información.
Mariscal ha recordado que Ávila puso en marcha un sistema de recogida de aceite en algunos municipios, sin que hubiera acuerdos ni consten en el Consorcio contratos o autorizaciones con empresas, ni nadie sepa de donde han salido los contenedores ni quien los ha pagado. A pesar de que la Junta General debe convocarse dos veces al año, en enero y julio, en 2009 sólo se reunió en una ocasión y este año tampoco se ha reunido en enero.
“Por todo esto, el CONSORMA es el consorcio de residuos peor gestionado de toda la región, el más antijurídico, el más antidemocrático y el más antiparticipativo de toda España”, señalaba.
Residuos de la construcción
Del mismo modo, Mariscal ha puntualizado que fue en el año 2008 cuando se acordó la adjudicación del Servicio Integral de Gestión de Residuos de la Construcción y vamos para año y medio, y nadie sabe que ha sido de ese “servicio pionero en toda España”, tal y como aseguró Ávila, que iba a constar de 16 instalaciones estratégicamente repartidas por la provincia para el tratamiento de estos residuos, que iban a suponer una inversión de 18 millones de euros y la creación de 31 puestos de trabajo.
“Mucho nos tememos que al igual que pasó con la planta móvil de machaqueo y su góndola y con los puntos limpios móviles pasará con el PIEMSA y los RCD’s. O se hace algo o estaremos ante un nuevo despilfarro de fondos públicos del que tendrán que dar cuenta los responsables, y un mal servicio a los ciudadanos y a los empresarios, mientras siguen apareciendo por toda la provincia los vertidos ilegales y escombreras”, aseguraba el diputado del PP.
Por todo ello, el balance que ha realizado el Grupo Popular no puede ser peor, ya que en dos años Ávila y sus carísimos asesores (alcaldes socialistas y ex gerentes) han conseguido situar a la provincia de Cuenca a la cola de la recogida selectiva de CLM y que sigamos siendo la única provincia que no cuenta con una planta de tratamiento de RCD’s autorizada.