El alcalde de Cuenca y vicesecretario de Electoral del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Francisco Pulido, ha lamentado hoy que el presidente Barreda continué obcecado en seguir la línea de su maestro, José Luís Rodríguez Zapatero ya que por este camino Castilla-La Mancha va a continuar en muy mala dirección.
Pulido, que ha estado presente en el Debate sobre el Estado de la región celebrado hoy en Toledo, ha destacado que el discurso de Barreda vuelve a ser más de lo mismo, “insistiendo en que la comunidad autónoma está bien cuando todos sabemos cual es la pésima situación de Castilla-La Mancha”, y que Barreda no hace más que seguir los pasos de su maestro, Rodríguez Zapatero, que hace unos días en China llegó a decir que la economía española estaba bien, “por lo que está más que claro que nos encontramos ante la práctica de un mismo socialismo, el binomio Barreda-Zapatero”.
Asimismo, el alcalde de Cuenca ha lamentado que Barreda, que es el presidente de todos los castellano manchegos, no haya entrado en los problemas reales de los ciudadanos y no haya dado cuenta de los grandes escándalos que han rodeado al Gobierno del PSOE en el actual mandato, como la intervención y posterior desaparición de CCM, el aval millonario a sus amigos empresarios del Aeropuerto de Ciudad Real, lo sucedido en la Fundación Virtus o el caso urbanístico de Seseña.
“Lo que está claro es que Barreda no quiere entrar en todos estos cúmulos de mala gestión, no quiere entrar en dar explicaciones para despejar las dudas que todos los castellano manchegos tienen sobre la pésima gestión del Gobierno socialista, que nos ha llevado a superar los 200.000 parados, por ejemplo, y ni mucho menos mencionar los graves escándalos por miedo a que los ciudadanos descubran la verdad”, apuntaba el alcalde de Cuenca.
El vicesecretario de Electoral del PP de Castilla-La Mancha ha recordado que Barreda es un apoyo y puntual firme de Zapatero, como ya ha demostrado en numerosas ocasiones, apoyando la subida de impuestos a los ciudadanos, la bajada del sueldo a los funcionarios públicos, la congelación de las pensiones o la ampliación de la Ley del Aborto, pese a que todo esto perjudique a su tierra y al bienestar de los castellano manchegos.
“Es tal su fidelidad a Zapatero y al PSOE, que Barreda prefiere seguir las directrices socialistas que velar por el futuro de Castilla-La Mancha, llegando a negar un Plan Hidrológico Nacional y la reforma del Estatuto de Autonomía, retirado por el PSOE en el último momento”, concluía Pulido.