El senador del Partido Popular por la provincia de Cuenca, Luis Fraga, partirá el 30 de noviembre hacia la sede de Naciones Unidas en Nueva York para iniciar sus trabajos en el Consejo Asesor de la UIP ante la ONU, en el que el parlamentario español, que cuenta para ello con el apoyo consensuado de todos los partidos políticos de España, representará a la los países de la Unión Europea y demás países occidentales.
Es la primera vez que un español forma parte de dicho Consejo Asesor, cuya función es coordinar la cooperación entre la ONU y la UIP, organismo parlamentario mundial del que Fraga forma parte como vicepresidente de la Delegación Española.
El senador por Cuenca fue designado para este cargo en septiembre de este año durante la Asamblea del a UIP que tuvo lugar en Ginebra. Aunque también optaban para dicho puesto otros seis candidatos del grupo geopolítico 12 plus, el parlamentario español contó con el apoyo de países mediterráneos, del Este de Europa, así como del Reino Unido, Portugal y Andorra. El senador por Cuenca se había postulado para tal responsabilidad tras pronunciar en noviembre de 2009, como representante de España, un discurso en la sede de la ONU en Nueva York en el que abogó por una adecuada reforma del Sistema de Naciones Unidas para hacer frente no sólo a los actuales desafíos transnacionales surgidos tras la crisis económica, sino a las nuevas circunstancias que afectan a los procesos de paz, en especial las formas actuales del terrorismo internacional y otras amenazas que apuntan a la necesidad de una nueva institucionalidad de gobernanza planetaria.
Fraga, que domina al menos seis idiomas además del español, no sólo participará por lo tanto en dicho Consejo para la ONU el 1 de diciembre, sino que también representará a España en la sesión conjunta que los días 2 y 3 del mismo mes se celebrará en la sede de la Asamblea General de la ONU en Nueva York.
La reunión del Consejo centrará sus trabajos en la aprobación el próximo día 13 de diciembre de una resolución de la Asamblea General de la ONU sobre la necesidad de una mejor coordinación interparlamentaria en el nivel mundial, entre otros asuntos. La sesión conjunta de los días 2 y 3 hará balance de las respuestas y las reformas institucionales ante la crisis económica, y abordará cuestiones como la recuperación económica mediante una gobernanza planetaria ante una posible reforma del Sistema de Naciones Unidas, así como los planes de ajuste y de rescate financiero en un marco de graves desequilibrios macroeconómicos con altos niveles de deuda pública, creciente desempleo y tensiones en los mercados de divisas.