Se entiende perfectamente la desesperación de los socialistas conquenses, porque están ya anticipando la debacle electoral que se les viene encima. Saben que, tras el 22M, seguirán en la oposición en Cuenca; que pasarán una larga temporada en la oposición en CLM; y que los españoles van a mandar a su casa, unos meses más tarde, al presidente del gobierno de España más nefasto que haya tenido la historia de nuestra nación.
Esta situación está provocando en los responsables socialistas de por aquí un estado cercano a la obsesión enfermiza, cosa que también entendemos.
El Alcalde de Cuenca, Francisco J. Pulido ha sido el alcalde con el que Cuenca ha empezado a convertirse en una ciudad bien comunicada. El salto que se ha dado en esa materia en esta legislatura ha sido importantísimo. Sin embargo Pulido no se conforma con eso y seguirá exigiendo más infraestructuras para nuestra ciudad.
Con Francisco J. Pulido, Cuenca es una ciudad más limpia, cuestión que ha quedado certificada con la obtención de una escoba de plata. Con Francisco J. Pulido, hemos avanzado en movilidad, sostenibilidad y participación. Por fin un alcalde ha impulsado el uso de la bicicleta creando carriles bici, ordenando las zonas 30, ampliando aceras, y construyendo un gran puente que conectara el Parque de los Moralejos con la zona de la Universidad. Por fin un alcalde se ha tomado en serio problemas como el de la contaminación acústica, ha incentivado el uso de vehículos no contaminantes y ha trabajado con rigor y seriedad en mantener y mejorar nuestro medio ambiente. Y por fin un alcalde, en lugar de hablar de participación, la ha puesto en práctica. El proceso de Agenda local 21 de Cuenca, así como la puesta en funcionamiento de numerosos consejos de participación, como de la comisión de sugerencias y reclamaciones son pruebas más que suficientes.
Con Francisco J. Pulido ha desaparecido el sectarismo a la hora de tomar decisiones para distribuir las inversiones. Prácticamente todos los barrios han sido receptores de mejoras durante esta legislatura. Algunos, como San Antón, con el URBANA, nunca en la historia habían recibido una inversión como la que el equipo de Francisco J. Pulido ha destinado a ese tradicional barrio.
Y ahora, con Francisco J. Pulido, Cuenca tiene un proyecto de ciudad definido. Un proyecto basado en la innovación y en la conversión de Cuenca en un gran Parque Científico Tecnológico. Un proyecto que creará riqueza y empleo duradero. El proyecto que Francisco J. Pulido tiene para los terrenos de RENFE será el germen de la gran transformación de la ciudad, de su salto a la modernidad. Y será realidad cuando María Dolores de Cospedal se convierta en Presidenta del Gobierno de Castilla-La Mancha.
Entendemos también, la obsesión enfermiza que ha acompañado a los socialistas conquenses con el que ha sido asesor de desarrollo local del Ayuntamiento. Un trabajador que ha realizado una impecable labor y que ha conseguido proyectos de tanta envergadura como el URBANA y LIFE. Un trabajador que ha desarrollado su labor de asesoría en las tareas que le han sido encomendadas por concejales y alcalde. Una de ellas ha consistido en asistir a las reuniones relativas al proyecto de los terrenos de RENFE, en el que ha trabajado con suma eficacia. José Ramón Pulido ha ocupado su espacio, el que le correspondía, asesorando a alcalde y concejales que han acudido a dichas reuniones. Ha habido otro, que pretende ser alcalde, que ha asistido a esas citas como convidado de piedra, sentándose en primera fila, cuando nada tenía que decir al respecto.
Tanto el asesor de desarrollo local, como el Director General de Recursos Humanos, han dimitido, cumpliendo con un plan de reducción de gasto que los socialistas se negaron a aprobar y que iba incluido en los presupuestos. Ellos deberán explicar por qué.
Ya avisamos que la campaña iba a ser sucia. Ahora, no esperábamos que el nivel, demostrado en el artículo que le han hecho firmar a Tornero, iba a ser el de “barra de bar”. Quien no tiene proyecto para la ciudad, quien tras un montón de años en la política en Cuenca no sabe qué quieren sus vecinos, quien tiene claro que a un socialista hoy no hay quien le crea, no tiene otra salida que enredar en asuntos personales, embarrar el campo como los malos jugadores y emponzoñar la vida política intentando obtener así algún voto perdido. Sin embargo, nosotros vamos a seguir trabajando por una ciudad a la que amamos, dedicando nuestros esfuerzos a Cuenca que es lo único que nos importa.