De toda su diatriba tratando de justificar lo injustificable, rasgándose las vestiduras, no diré como un fariseo pero sí como un mal actor, y tratando de descalificarme como concejal y como padre, me quedo con esta frase: "Le aseguro que tomaremos necesarias medidas para que no vuelvan a suceder estos accidentes".
Bien está porque lo que pretendía con mi anterior carta era precisamente eso, que el Ayuntamiento de Buenache de Alarcón tomara las medidas necesarias para no tener que lamentar un grave accidente por la falta de señalización de las obras públicas.
Dicho esto, señor alcalde, le robaré un segundo más de su tiempo para advertirle como convecino de lo que me temo que es una conspiración contra su persona. Me temo que le están haciendo 'luz de gas'. Sólo así se entiende que personas muy cercanas a su formación política le hayan ocultado el primer accidente que sufrieron de primera mano. Y sólo así se entiende que no le hayan facilitado el parte médico de urgencias en el que queda claro que el accidente de mi hijo no fue a las doce de la noche sino antes.
Le aclaro, además, que mi hijo no montaba en bicicleta y que si yo soy un mal padre por permitir que salga a la calle de mi pueblo, a esas horas, en una noche de verano, Buenache de Alarcón está lleno de malos padres.
Nada que no pueda remediar, don Segundo, con un buen toque de queda. Le recomiendo además que sea un toque de queda 'selectivo': para la oposición y los no nacidos en Buenache de Alarcón, que a lo que se ve en su escrito somos ciudadanos de segunda sin derecho a denunciar aquello que consideramos malo.
No le entretengo más, don Segundo, salvo para aclararle que aquí nadie tiene la capacidad de otorgar el carnet de buenachero pata negra. Afortunadamente en esta democracia haber nacido en un sitio o en otro no es ningún mérito. Es más, mientras usted es buenachero porque no le queda más remedio, yo me permito el lujo de elegir serlo y por eso me he empadronado aquí y por eso trato de mejorar la calidad de vida de mis vecinos aportando mi tiempo como concejal en el Ayuntamiento. Por cierto, pregunte a su teniente de alcalde cuantas veces he ido a su casa para plantearle algunos problemas dado que nuestro Ayuntamiento cierra sus puertas por la tarde y algunos, afortunadamente, trabajamos para ganarnos la vida.
Quedo a su disposición para que "este pueblo siga mejorando" y lo dicho, gracias por atender mi petición y comprometerse a señalar debidamente las obras en nuestro pueblo para evitar accidentes.
José María Rosario
Concejal de Buenache de Alarcón.