Ojalá no sirva esta opinión para asociar la mejora de la accesibilidad al casco antiguo de Cuenca directa y únicamente con la instalación de remontes mecánicos, ojalá no sirva tampoco para priorizar éstos sobre otras acciones más urgentes en cuanto a la accesibilidad al casco antiguo y, por qué no decirlo, sobre otras acciones en el resto de la ciudad más acuciantes. Pero la estrategia política del actual equipo de gobierno municipal ha querido dotar de actualidad a esta intervención y convierte en ineludible que nos pronunciemos de nuevo sobre la misma.
Estamos convencidos, el Grupo Municipal Popular del Ayuntamiento de Cuenca, de que nuestro casco antiguo, su capacidad de impulso y atracción turística, y también su propio carácter como símbolo e identidad de la ciudad, han de estar necesaria y oportunamente al servicio del conjunto de la población, al servicio de la dinamización del conjunto de la ciudad. Ya basta de que las decisiones sobre el casco antiguo hayan partido siempre de considerarlo como un ente aislado del resto de la ciudad, eminentemente turístico, de forma que, lejos de generarse sinergias entre la población de los distintos barrios, incluso han surgido ciertos sentimientos encontrados entre los residentes de la ciudad y los de su casco antiguo (como si ambas cosas fueran excluyentes).
Al contrario, creemos que cualquier decisión sobre el casco antiguo debe formar parte de una estrategia global de ciudad: el conjunto de la ciudad necesita de las oportunidades que le brinda el casco antiguo, como recinto patrimonio de la humanidad y referente turístico, y la población residente en él necesita buscar y encuentra los servicios que precisa imperiosamente en el resto de la ciudad. En este contexto, estamos convencidos de que el cómo y por dónde deben ser o estar cada una de las medidas de mejora de la accesibilidad al casco antiguo, entre ellas los remontes mecánicos, debe estar de acuerdo, siempre, a una estrategia global de ciudad.
Es sabido que la última propuesta conocida para la mejora de la accesibilidad al casco antiguo de Cuenca mediante ascensores, a la que precedieron otras ocurrencias al respecto como la transformación de una de las pilas del Puente de San Pablo, fue propiciada por la JCCM como estrategia política de desgaste del equipo de gobierno municipal de la legislatura anterior, de forma que la misma no estuvo entonces destinada a presupuestarse. Si bien es cierto que, actualmente, y aunque ahora lo estuviéramos creyendo ilusoriamente porque todavía fuera una simple estrategia política, dicha propuesta ha sido revestida de mayor realidad al presupuestarse para el próximo ejercicio de 2020 (aunque, curiosamente, sin justificación de su cuantía). Como desarrollo de dicha 'nueva' estrategia política, los medios de comunicación informaron recientemente de la firma de un protocolo entre el Ayuntamiento de Cuenca y la JCCM para trabajar conjuntamente en la mejora de la accesibilidad al casco antiguo y, más recientemente, del desplazamiento a la ciudad de "técnicos de la JCCM para localizar los emplazamientos posibles".
En otro orden de cosas, sabemos que el equipo de gobierno municipal actual ya conoce, en lo fundamental, la opinión de UNESCO y, sobre todo, de ICOMOS ESPAÑA en relación a que el paisaje de la Hoz del río Huécar debe ser estrictamente conservado en su tramo más emblemático para la ciudad (entre Puente del Portland y Barrio del Castillo) y, en consecuencia, que conoce el rechazo prácticamente frontal de dicho organismo a la implantación de los ascensores próximos a Casas Colgadas y Archivo Histórico Provincial que fueron propuestos en dicho entorno, tan especialmente sensible, por la JCCM (apoyada en el trabajo del grupo Cuenca_In).
Y sabemos también que el propio equipo de gobierno (o, al menos, algunos de sus miembros) duda de la solución antes referida e, incluso, que comienza a rechazarla. Recordará también el equipo de gobierno municipal, y ojalá no les pareciera anecdótico, que dicha opinión de UNESCO e ICOMOS ESPAÑA coincide con la que el Grupo Municipal Popular ya expresaba en el programa electoral con el que concurrió a las pasadas elecciones municipales, la cual dicho grupo ha venido defendiendo en cuantas oportunidades ha tenido para dirigirse a la opinión pública.
Y todo ello nos lleva, finalmente, al objetivo principal de este artículo de opinión: poner de manifiesto públicamente que el Grupo Municipal Popular considera que el debate sobre la mejora de la accesibilidad al casco antiguo mediante remontes mecánicos no está, ni mucho menos, suficientemente consensuado en la ciudad para poder delegar en la JCCM su prosecución, sino que, al contrario, es necesario fomentar un debate en el que dicha intervención intente encontrar el consenso de la ciudad y, por ello, pueda convertirse en empeño colectivo que permita, siempre que fuera necesario, superar la barrera temporal de ésta y las siguientes legislaturas.
El Grupo Municipal Popular tiene, a este respecto, una propuesta que, si bien considera es la más adecuada, sabe que es exclusivamente suya y necesita debate por ello:
Propuesta número 88 del programa electoral #CuencaEsCapaz
[https://drive.google.com/file/d/1NrkVLaoyDXrBZz0q4xAlffk9qKxtpmCq/view].
En síntesis, nuestra propuesta trata de mejorar la accesibilidad al casco antiguo enfocándola, primero, a las necesidades de todos los ciudadanos de Cuenca y, luego, a las de los turistas. Una propuesta que se materializa mediante el diseño de dos itinerarios apoyados en escaleras mecánicas, de los que priorizábamos (y priorizamos) el primero de ellos por su mayor confluencia con el resto de la ciudad, con los itinerarios habituales y con el sector de mayor población residente en el casco antiguo.
Dicho itinerario parte del propio centro urbano (calle Fray Luis de León), con cuya estrategia de dinamización debe incardinarse (EDUSI CUENCA 2022), y, 'colonizando' paulatinamente el casco antiguo, sirve también a la accesibilidad de los barrios intermedios (ALMUDÍ, RETIRO, SANTO DOMINGO, EL SALVADOR, PUERTA SAN JUAN, EL PESO, SAN ANDRÉS...), a dinamizar la actividad en múltiples zonas/remansos de dichos barrios intermedios, a potenciar el recorrido paisajístico de la inacabada hoz del río Júcar y, en definitiva, a alcanzar las cotas superiores del casco antiguo como resultado del cómodo paseo a través de gran parte de él. La mejora de la accesibilidad al casco antiguo desde el propio centro urbano, con la consecuente dinamización de ambas zonas de la ciudad, puede y debe ser también una estrategia de potenciación y dinamización turística del conjunto de la ciudad; no será así si se plantea como hasta ahora, de forma endogámica, como cuestión exclusiva del casco antiguo, con fines casi exclusivamente turísticos y ajena al resto de la ciudad.
Nunca contemplamos, por cierto, otra alternativa a las escaleras mecánicas dado que creemos firmemente en su mayor potencial urbano frente al del ascensor, al permitir un recorrido 'próximo'a la calle (funcional y paisajísticamente) y con mucha mayor capacidad de tráfico.
¿Será posible debatir esta propuesta, confrontarla, en aras a ese sincero debate que demandamos?